La Cofradía Penitencial de la Santa Eucaristía tiene su sede canónica en el Colegio Ntra. Sra. de Begoña – Jesuitak Indautxu.
1940-1950
1940 - Cruzada Eucarística de Indautxu
Antes de la fundación de la Cofradía, ya desde 1940, había participantes de nuestro entrañable colegio de Indautxu en las procesiones bilbaínas, como jóvenes representantes de la Cruzada Eucarística de Indautxu, que entonces dirigía el P. José Julio Martínez, S.J.
En la misma época otro numeroso grupo de antiguos alumnos participaba en las procesiones de Jueves Santo y Viernes Santo como filiales de la Santa Vera Cruz de Bilbao.
1950-1960
En la década de los años 50 estos dos grupos del colegio acudían juntos a las procesiones, con un lazo que les servía de unión entre los dos: la banda de cornetas y tambores de la Cruzada Eucarística.
1959 - Fundación de la Cofradía Penitencial de la Santa Eucaristía
Por fin se decide la reorganización y constitución de la Cofradía de la Santa Eucaristía mediante la integración de todos los cofrades: de los antiguos alumnos, de los Cruzados Eucarísticos y de su banda de cornetas y tambores.
Se funda como tal, con entidad jurídica propia y con sus propios estatutos aprobados, el 6 de mayo de 1959.
En este año de 1959 y aprovechando la fundación de la cofradía, se nombra al P. Pérez Izarra, S.J. Hermano Abad de Honor Perpetuo, por su trabajo incansable durante muchos años a favor de las labores por la cofradía en el seno del colegio.
1960-1970
A partir de la fecha de la constitución de la cofradía es el jesuita Hermano Marcos el verdadero impulsor de la misma. Fue una época de gran esplendor para el desarrollo y asentamiento del espíritu que generó la cofradía.
1970-1980
Es en los años 70 cuando se produce una severa recesión en el ámbito, no sólo de nuestra cofradía, sino en todas las hermandades de Bilbao, reduciéndose el número de cofrades y de actividades a realizar fruto básicamente de dos aspectos: la crisis devocional y el cambio de costumbre en la Semana Santa.
1980 - actualidad
Pero cuando se vislumbraba la desaparición de la propia cofradía e incluso de las propias procesiones, una nueva generación de jóvenes suficientemente motivados, reavivan la llama, inscribiendo nuevos cofrades y participando activamente en la liturgia y pastoral del colegio.
Durante estas últimas décadas la cofradía ha mantenido una línea regular tanto en el número de cofrades activos y benefactores, como en las actividades realizadas, llegando incluso a organizar desde el año 1984 su propia procesión, el Sábado de Pasión, con la dificultad que ello implica y arropados por las demás hermandades de la villa.
